Los entrenadores de los dos equipos habían dicho que era el partido del año. Y obraron en consecuencia. José Antonio Reyes fue duda hasta última hora debido a una lesión muscular que arrastraba, pero Quique Sánchez Flores no quiso reservar al habilidoso extremo, y lo puso de titular junto con Simão, Diego Forlán y Sergio Agüero. La principal novedad en el equipo local fue la presencia de Juanito en el eje de la zaga junto al canterano Álvaro Domínguez. El Valencia, más acuciado por las bajas, presentó una defensa novedosa. Alexis Ruano jugó de central junto a Manuel Fernandes y Hedwiges Maduro, mientras que el canterano Jordi Alba y Pablo Hernández ocuparon los carriles.

Unai Emery no quiso forzar desde el principio a David Navarro ni a David Albelda. Pero si el Atlético puede presumir de cuarteto ofensivo, el Valencia salió ayer con otro póker con clara vocación atacante: David Silva, Joaquín Sánchez, Juan Manuel Mata y David Villa. Sin duda una declaración de intenciones del técnico valencianista.

Empezó eléctrico el choque, con una ocasión de Agüero a la contra. Su disparo salió a la derecha de la meta defendida por César Sánchez. El Atlético salía presionando muy arriba, lo cual dificultaba la transición del Valencia. Rubén Baraja y Silva, encargados de llevar el peso del equipo, se veían superados en el centro del campo y no lograban hacerse con las manijas del encuentro. Eso sí, cuando salía con espacios por delante, el Valencia hacía callar a la afición rojiblanca.

Pero pasaban los minutos, y el conjunto local seguía dominando el choque. En el 27’, Simão remató alto un centro desde la izquierda. Diez minutos después, fue Raúl García el que lo intentó desde fuera del área, pero también salió por encima del travesaño su disparo. De ahí al descanso muchas faltas y poco fútbol.

Algo diferente tenía que proponer el Valencia en la segunda parte si quería conseguir el pase a las semifinales de la UEFA Europa League. Pero el que introdujo un cambio en el descanso fue el técnico local. Reyes, muy alterado en el primer tiempo, dejó su sitio a José Manuel Jurado. Y al igual que en el primer periodo, la segunda mitad empezó con una clarísima ocasión para los colchoneros. Forlán encaró solo a César tras un pase del ‘Kun’ Agüero, pero su vaslina no encontró portería por muy poco. De nuevo era el Atléti el que mejor plantado estaba en el campo.

Cerca estuvo Tomáš Ujfaluši de reflejar ese dominio en el marcador en el 64’. Jordi Alba despejó de manera defectuosa un balón que le recogió Agüero. El argentino se internó en el área y le dio el pase atrás al checo, que no acertó a definir ante César. A raíz de ahí, empezó a desperezarse el Valencia, que probó fortuna con un disparo de Villa que se marchó por encima de la portería de De Gea. Acto seguido, Emery retiró a Joaquín y Mata para dar entrada a Vicente Rodríguez y Nikola Žigić en busca de más mordiente en ataque. Pero fue el Atlético el que más cerca estuvo del gol, otra vez. Forlán mandó un derechazo desde la frontal que César despejó y acabó pegando en el palo derecho del meta ‘ché’. El paso de los minutos hizo que el Valencia se partiera en dos para buscar el gol, lo que dejaba muchos espacios al Atlético, que se mostraba amenazante con Forlán, Jurado y Agüero saliendo a la contra.

El Valencia no se daba por rendido, y en el 80’, Villa dispuso de la ocasión más clara para los visitantes. El delantero asturiano recibió un buen pase a la espalda de la defensa atlética y su disparo rebotó en el larguero. El Calderón enmudeció. A partir de ahí, el Valencia soltó lastre y se fue definitivamente en busca del gol que les diera las semifinales. Žigić remató de cabeza en el 85’ y De Gea respondió con una parada llena de reflejos. En el posterior córner, fue Navarro el que lo intentó, pero de nuevo el meta atlético despejó a saque de esquina. Eran, sin duda, los mejores minutos del Valencia.

Pero la reacción visitante llegó demasiado tarde y, aunque Vicente lo intentó en el 90’, el marcador permaneció inalterable. Así pues, y gracias al 2-2 cosechado en Mestalla, el Atlético jugará la semifinal de la UEFA Europa League ante un Liverpool que se impuso al SL Benfica.