Articulo

Unai exige a Negredo y Emaná en caso de que Villa y Silva se marchen

Emery se mostró especialmente preocupado en dos aspectos: la “operación salida”, de la que se está encargando personalmente Fernando Gómez; y la situación actual de Villa y Silva. En lo referente a las salidas, Fernando ya ha traspado, cedido o rescindido a Butelle, Bellvis, Lombán, Edu, Albiol y Sunny; está a punto de salir cedido Guaita al Murcia; y se busca traspasar a Miguel, Zigic, Moretti, Banega, Angulo y Hugo Viana. En este sentido, Fernando Gómez y Emery llegaron ayer a un consenso: pese a las declaraciones del futbolista hace unas semanas, si el club no puede vender a Ever Banega, el argentino hará la pretemporada con el Valencia. Del mismo modo, el club obligará a Unai a contar con Zigic si no llega una buena oferta por el serbio. No será el caso de Viana y de Angulo, con los que Emery no cuenta para el “stage” en Ermelo.

Unai preguntó por la situación de Villa y Silva, y los planes del club para los “cracks” del Valencia. Llorente aseguró a Emery que Silva es intransferible y que no negociarán su salida bajo ningún concepto. La predisposición del club a negociar en el caso de Villa es mayor, dado que Llorente ha tasado al “Guaje” en una cifra superior a cincuenta millones y sigue a la espera de que llegue una oferta por el asturiano. A fecha de ayer, ni Barcelona ni ningún otro club habían vuelto a la carga por Villa, manteniendo el “impasse” de los últimos días.

Emery aprovechó la reunión para martillear a presidente y director técnico con sus dos favoritos para reforzar el equipo: Álvaro Negredo y Achille Emaná. En el caso del delantero madrileño, Llorente le advirtió que sería casi imposible su incorporación mientras el Madrid no volviese a mostrarse interesado en Villa. Dada las dificultades en su incorporación, Llorente volvió a advertir a Emery que tendría que contentarse con uno de los nombres que maneja Fernando en su lista de delanteros, que cuenta con seis o siete posibles candidatos (entre los que se incluyen Uche o Kalinic) cuyo precios oscilan entre los 6 y los 23 millones de euros.

No obstante, el técnico del Valencia se topó con una férrea oposición en el caso de Emaná. El futbolista camerunés no convence a Fernando en el plano deportivo, ya que considera que el equipo requiere un futbolista con un perfil distinto y con más énfasis en la creación… como podría ser Esteban Granero. Por su parte, Llorente no ve con buenos ojos la incorporación de un jugador que esta temporada ha sido noticia en Sevilla por sus “líos” extradeportivos a altas horas de la madrugada. El presidente ya ha cortado de raíz los desplantes de Miguel Brito al querer desembarazarse de él a toda costa, y tampoco le tembló el pulso a la hora de “cargarse” al panameño Ruben Douglas (todo un “maestro” en la noche valenciana) en su etapa como gestor del Pamesa Valencia.